El nuevo Penal de Telares: un hito arquitectónico con enfoque en la reinserción
El nuevo Penal de Los Telares, ubicado en el extremo noreste de la localidad, se erige como un símbolo de seguridad y reinserción en Santiago del Estero. Concebido para un régimen de alta Seguridad, el complejo arquitectónico abraza un enfoque holístico que prioriza tanto la seguridad individual como la calidad de vida de los internos. Fue inaugurado por el Gobernador Gerardo Zamora en la jornada de este viernes 8 de marzo.
Con una muralla perimetral de gran altura que rodea el complejo, el diseño interior se organiza en módulos paralelos conectados por un eje peatonal central. Desde el Módulo Cero, que alberga el control de acceso, hasta los pabellones de celdas equipados con mobiliario metálico y baños externos, cada detalle está pensado para garantizar la seguridad y la comodidad de los internos.
Estos módulos siguen una secuencia lógica relacionada con la seguridad, denominándose al Modulo Uno de Comando y Administración. El segundo es el módulo de los Programas y Servicios, que es de mayor superficie cubierta debido a la cantidad de actividades que en él se desarrollan. A continuación, el patio, de gran superficie, ya forma parte del área carcelaria propiamente.
El tercer módulo es el que alberga los pabellones de las celdas. Dicho módulo está conformado en dos plantas conteniendo 76 celdas para dos internos cada una. El cuarto y último módulo, correspondiente al pabellón de celdas para internos separados del régimen común con 6 celdas. Todas equipadas con mobiliario fijo metálico y baños externos, por cuestiones relacionadas con la seguridad general y la higiene.
El proyecto, gestado por la gestión del gobierno provincial, se distingue por su arquitectura uniforme de estilo contemporáneo moderno, con líneas limpias y volúmenes puros que enfatizan la horizontalidad. Las columnas y vigas, diseñadas para simbolizar el encierro, confieren al edificio una presencia imponente, mientras que los materiales como el bloque de cemento pintado y el hormigón armado aportan un toque vanguardista.
A pesar de su enfoque en la seguridad, el proyecto no pierde de vista el aspecto humano de quienes habitarán el lugar. Se ha creado un ambiente cálido y amigable, con detalles simples pero significativos, que buscan facilitar la rehabilitación y la reinserción de los internos en la sociedad.
Este innovador complejo carcelario no solo representa un avance en términos de seguridad, sino también un paso adelante en el camino hacia la reintegración social.
